Uruguay tiene la posibilidad de convertirse en un centro logístico y hasta financiero del Mercosur
El Embajador Chino Sr. Huang Yazhong refutó la idea errónea de que China sigue siendo una "fábrica del mundo", enfatizando que la realidad actual es muy diferente de esa percepción desactualizada.
En conferencia en la Facultad de Derecho de la Universidad de la República (UDELAR), el Embajador de la República Popular China, Sr. Huang Yazhong, dio inicio a su disertación agradeciendo sinceramente la valiosa colaboración que la Universidad ha brindado a China. Destacó que ambos países son socios naturales y que, a lo largo de 14 años, China ha sido el mayor socio comercial de Uruguay, lo que resalta la importancia de esta relación bilateral.
El Embajador expresó su honor por la oportunidad de estar presente en este evento, como mencionaron el Rector y el Decano. Resaltó que la cooperación entre China y la Universidad de la República es amplia y variada. Entre los ejemplos más significativos, mencionó la creación del primer Instituto Confucio en el país y la reciente inauguración del Laboratorio Conjunto de Bionanofarma, lo que refleja el alto nivel de colaboración no solo entre China y Uruguay, sino también en el ámbito académico.
En esta ocasión, Huang Yazhong se propuso abordar varios temas que considera de gran relevancia. En la primera parte de su intervención, se enfocó en la «verdadera China», haciendo hincapié en la necesidad de desmentir las informaciones erróneas que circulan en la prensa local. Explicó que existe un déficit de conocimiento sobre la realidad china, por lo que consideró importante hablar sobre la historia de China, su rica civilización y los logros actuales, así como las estrategias de desarrollo que se están implementando para el futuro.
La segunda parte de su discurso se centró en las relaciones entre China y el mundo, abordando la diplomacia china y la política exterior actual y futura. En la tercera sección, se refirió a las cooperaciones entre China y América Latina, enfatizando la importancia de fortalecer estos lazos.
Huang explicó que, a diferencia de los casi 200 países que conforman el mundo actual, China es considerada, por muchos especialistas, como un «estado de civilización». Esto se debe a su diversidad cultural, con 56 etnias y una pluralidad de religiones. Resaltó que el presidente Xi Jinping ha definido la civilización china a través de cinco características claves
Enumerando algunas definio. La primera es la continuidad; la civilización china es la única que ha perdurado ininterrumpidamente desde la antigüedad. La segunda característica es la innovación, que ha estado presente a lo largo de la historia china, no solo en inventos tecnológicos, sino también en filosofía y conceptos de desarrollo, lo que ha permitido a China adaptarse y evolucionar constantemente.
La unidad es la tercera característica. A pesar de contar con una diversidad étnica considerable, China ha logrado mantener la cohesión entre sus diferentes grupos, lo que ha permitido una convivencia pacífica a lo largo de su historia. En este contexto, mencionó el tema de Taiwán, explicando que, aunque aún no se ha logrado la unificación completa, Taiwán ha sido históricamente parte de China y que la resolución 2758 de la ONU, aprobada en 1971, reconoce al gobierno de la República Popular China como el único legítimo que representa a toda China.
Huang Yazhong subrayó que, si bien se busca una unificación pacífica, no se puede renunciar a nada en caso de ser necesario, especialmente porque algunos países parecen querer utilizar la cuestión de Taiwán como instrumento para contener a China.
Aludió a cambios recientes en la política estadounidense, que han generado preocupación en cuanto a la estabilidad en Asia.
Operaciones de Paz y economía
El Embajador también destacó que China es uno de los países más activos en las operaciones de mantenimiento de paz de la ONU. Afirmó que, a pesar del crecimiento de la modernización de las fuerzas de defensa de China, el gasto militar representa solo el 1.4% del PIB, por debajo de la media mundial, lo que refleja el carácter pacífico de su civilización.
En cuanto al crecimiento económico, Huang señaló que, aunque durante la última década China experimentó un rápido crecimiento, actualmente la tasa ha disminuido a un 5-6%. Sin embargo, destacó que, a diferencia de otros países, China no sólo mantiene este crecimiento, sino que también está mejorando la estructura de su economía.
La economía china ha evolucionado de ser predominantemente agrícola a convertirse en un referente de innovación. Huang Yazhong resaltó que, en el inicio de las reformas económicas, China dependía en gran medida de la mano de obra para sus exportaciones. Sin embargo, en los últimos años, esta dinámica ha cambiado drásticamente, con la industria intensiva en mano de obra representando ahora solo el 10% de las exportaciones, mientras que el 90% corresponde a sectores tecnológicos y de capital.
Huang Yazhong refutó la idea errónea de que China sigue siendo una «fábrica del mundo», enfatizando que la realidad actual es muy diferente de esa percepción desactualizada. En este sentido, mencionó que la Organización Internacional de Industria de la ONU reconoce a China como el único país capaz de fabricar una gama completa de productos industriales.
Hoy, China produce más del 40% de los principales productos industriales a nivel global, superando significativamente a países como Estados Unidos, Japón y Alemania. En cuanto a su dependencia del comercio exterior, Huang Yazhong señaló que esta ha disminuido del 60% hace diez años al 30% actual, lo que indica un aumento en la autosuficiencia del país.
El Embajador también comentó sobre el desarrollo logístico de China, destacando que siete de los diez puertos más grandes del mundo están situados en su territorio. Esto permite que una gran parte de las operaciones marítimas globales estén vinculadas a China. A pesar de las amenazas de tarifas arancelarias de Estados Unidos, Huang cuestionó cómo podrían implementarse, dado el control que China ejerce sobre los puertos.
La infraestructura logística, incluyendo autopistas y trenes de alta velocidad, ha sido vital para el crecimiento económico de China, ya que reduce significativamente los costos de producción. Más del 60% de los trenes de alta velocidad del mundo se encuentran en China, así como un porcentaje similar en infraestructura de telecomunicaciones 5G.
Liderando en patentes
Huang resaltó que China cuenta con el mayor número de científicos tecnológicos del mundo y forma anualmente más de 5 millones de ingenieros en sus universidades. En términos de innovación, China lidera en patentes y publicaciones científicas, desafiando la narrativa de que es un país en desarrollo.
Además, mencionó las políticas estadounidenses que buscan restringir la exportación de tecnología a China. Esto ha generado un superávit comercial significativo a favor de China, a pesar de que muchas ganancias en el comercio son obtenidas por empresas transnacionales estadounidenses que operan en el país. Así, el verdadero beneficiario de este comercio son los inversores en lugar del pueblo.
Huang también abordó el crecimiento económico de China, indicando que más del 60% proviene de innovaciones tecnológicas. En el ámbito ambiental, China lidera en la construcción de energías renovables y tiene un compromiso firme con la lucha contra el cambio climático, buscando alcanzar el pico de emisiones de carbono en 2030 y reducirlas a cero para 2060.
Eliminando la pobreza
El Embajador concluyó señalando que en los últimos diez años, China ha logrado eliminar la pobreza absoluta, sacando a 700 millones de personas de la pobreza en las últimas tres décadas. La esperanza de vida ha aumentado a 79 años, superando incluso la de Estados Unidos. A pesar de los nuevos desafíos, como el envejecimiento de la población, China ha establecido el sistema de seguridad social más grande del mundo, logrando una cobertura superior al 95%.
Finalmente, Huang Yazhong destacó que el 91% de los ciudadanos chinos confían en su gobierno y en el camino que han tomado. En relación al futuro, mencionó que, durante el vigésimo congreso del Partido Comunista de China, se aprobó un plan de desarrollo que busca una modernización al estilo chino para el año 2049, coincidiendo con el centenario de la fundación de la República Popular China.
Este camino hacia la modernización se centra en la prosperidad común, priorizando a las personas sobre el capital y asegurando que todos los ciudadanos se beneficien del crecimiento económico. Huang Yazhong cerró su discurso reafirmando la disposición de China para colaborar y trabajar en conjunto para promover iniciativas que beneficien a ambos pueblos.